Sunny day

Me gustan las mañanas de domingo, y no me refiero a madrugar sino a esa hora en que el Sol está mas alto, al medio día. Una mañana de domingo -sea invierno o verano- siempre es soleada y hay una buena temperatura, te anima a hacer cosas, a moverte, a pasear, a salir a la calle.

Pero ¡joder, lo que cuesta salir a la calle! Después de meses sin salir una mañana por el puro placer de hacerlo, hoy he pensado que sería buena idea dar una vuelta y aprobechar para hacer unas fotos con la cámara analógica. En un principio el día prometía bien poco, porque un día entre cuatro paredes es un día sin más; lo único que ofrece es la rutina de los domingos de ver la tele hasta tarde, comer, ver otro rato la tele y sentarse al ordenador pensando en que el lunes está cada vez más próximo. Sin embargo la cosa cambia cuando asomas la cabeza por la ventana y te das cuenta de que frente al aburrimiento dominical tienes un "algo" que te ofrece la mano y al estrechársela te arrastra al exterior.

Una vez pasado hacia afuera el umbral de mi cueva y sufrir luz solar que hacía eones que no veía, la música ha empezado a sonar y, cámara al cuello, he salido a explorar las afueras. La búsqueda ha resultado 100% exitosa: cerca de mi casa, al cruzar la carretera dirección La Alberca hay un terreno gigantesco cubierto de hierbajos con unas cuantas casas viejas y una balsa sin agua, como un campo abierto de hierba alta, con senderos con palmeras a los lados. Es una lástima que tenga que esperar a revelar las fotos, lo primero que he pensado es que sería un lugar genial para una partida de paintball o airsoft. En fin, como supondréis me he puesto las botas haciendo fotos, y después he vuelto a casa.

En resumen ha sido una buena mañana, me he animado bastante. Me he dado cuenta de que un día libre es más que una buena oportunidad de quedarse durmiendo, precisamente ahora que tengo una vida cada vez menos activa y cada vez menos interesante. Seguramente tome la determinación de hacer esto todos los domingos que me sean posibles buscando sitios interesantes a los que ir a explorar.

Este año nuevo me autopropuse ciertas cosas, entre las cuales incluí buscar una nueva actividad, un entretenimiento, algo fuera de la rutina que mantenga mi mente despierta, y habiendo visto las cosas que han pasado estas dos semanas y pico que llevamos de 2009 creo que voy a poder cumplirlas aunque sea lentamente. Y de alguna manera estoy contenta porque no son las típicas promesas de año nuevo de "apuntarse al gimnasio" o "dejar de fumar", sino cambios cruciales que quizás se hagan patentes.